03 mayo 2006

Probando VMware Server

Hoy me he decidido a probar por vez primera la herramienta de virtualización conocida como VMware (la versión para Hasefroch para más señas). Concretamente he trasteado con la versión Server, "liberada" recientemente. Y no, no es de código libre (que yo sepa), pero sí que desde hace pocos días ha pasado a ser gratuita, cosa que a su vez ha obligado a M$ dar también gratis su alternativa, el M$ Virtual Server. Todo sea por mantener la cuota de mercado. ¿Para cuando M$ Office gratis -legal, quiero decir- que compita con OpenOffice y su formato recién estandarizado por ISO?

Lo que me parece raro es que se hayan decidido a dar gratis a los pesos pesados de sus respectivas líneas de productos, en vez de empezar por las versiones supuestamente inferiores (VMware Workstation y M$ Virtual PC respectivamente). Hay gato encerrado. Fijo.

Bueno que me voy por los cerros de Úbeda, a lo que iba: he usado de sistemas operativos guest (los que corren dentro de VMware) un par de los “complicados” para este tipo de programas:

  • Knoppix 5.0 DVD (no instalado, arrancado desde imagen LiveCD iso)
  • OpenBSD 3.9 (sólo imagen cd39.iso, resto de sistema instalado por FTP)

Y digo complicados porque uno es un GNU/Linux LiveDVD y el otro es un sistema no tan habitual (un BSD) además de ser los dos recién saliditos del horno.

El resultado es que VMWare puede correr sin problemas los dos sistemas a la vez, sin ralentizar el sistema operativo host que corre por encima. Y eso es decir mucho, teniendo en cuenta que el Knoppix solito consume una barbaridad (LiveDVD, descompresión al vuelo, etc). Además es capaz de suspender los sistemas arrancados y resumirlos donde estaban. Los sistemas host se ejecutan medianamente fluidos (Knoppix lógicamente menos) y en general se tiene un consumo de memoria aceptable. Hay que tener en cuenta que las versiones Server no están pensadas para usos interactivos o de escritorio.

La conectividad de los guests hacia fuera del VMware Server por red es sencillamente genial. Se le indica que use NAT y los guests reciben automáticamente una IP por DHCP y a navegar! ¡Esto sí que es Plug&Play!. Por supuesto también funcionan perfectamente las conexiones por red entre diferentes guests.

Lo interesante es que soporta sistemas operativos guest de 64 bits, multiprocesamiento virtual (SMP) y la tecnologia de virtualización de Intel (sea lo que sea esto último).

Por cierto, OpenBSD tiene uno de los instaladores más espartanos -pero efectivos, eso sí- que he visto en muuuuucho tiempo. Todo en línea de comandos, estilo pregunta-respuesta, SIN ncurses. Más espartano incluso que el make menuconfig del kernel Linux para los que lo hayan sufrido.

En resumen, se trata de una buena opción a considerar siempre que queramos probar sistemas operativos nuevos sin hacer particiones al PC y, objetivamente, es más fácil de configurar todo que con el resto de alternativas libres (como Bochs o Qemu) y no libres.

Nota: 7/10

1 comentario:

Tomàs Reverter dijo...

Ueii des de quan tu per aquí??

Benvingut al planet!! :P